Las reformas en casa las solemos hacer en el momento en que necesitamos cambiar algo, sea porque se ha estropeado o porque lo preferimos de otra manera. Pocas veces pensamos en qué época es mejor para hacerlas, y en si el clima puede influir de alguna manera.
No todas las personas pueden elegir el mejor momento del año para hacer una reforma. Ya que, suelen aprovechar cuando están de vacaciones o tienen tiempo libre.
Reformar la casa es una decisión importante en la que hay que tener en cuenta factores que van más allá del presupuesto o las intervenciones a realizar
Otoño
De ésta época otoñal tienes que saber que, el período que va desde principios de septiembre a mediados de diciembre no es una mala opción para poner en marcha la reforma de tu casa. En esos meses no hay demasiados festivos. Las vacaciones quedan aún lejos y los plazos para la tramitación de licencias o recepción de materiales no serán un problema.
Es la época perfecta para realizar tanto una reforma integral como intervenciones parciales, ya sea cambios de instalación eléctrica, pintura de paredes, fontanería, reforma de cocinas, sustitución del suelo… Eso sí, si estás pensando en reformar exteriores ten en cuenta que las lluvias pueden suponer un hándicap.
Invierno
Es junto con la primavera, uno de los mejores momentos para reformar la casa. Como en el caso del otoño, no tendrás que enfrentarte a demoras por periodos vacacionales o días festivos. Y además, podrás detectar muchas deficiencias que, durante los meses de calor pueden pasar desapercibidas.
Cuestiones como humedades a causa de las lluvias, las deficiencias en el aislamiento o problemas con las ventanas serán más fácilmente identificables en esta época del año y suelen protagonizar buena parte del capítulo de reformas en invierno.
Primavera
Las condiciones climatológicas de la primavera hacen de esta estación uno de los mejores momentos para hacer una reforma en casa. No hay demasiados festivos y tampoco las lluvias o el viento suelen ser demasiado acusados por lo que, los factores externos, no tienen por qué retrasar o afectar al proyecto de reformar la casa.
Es una buena época para pintar toda la casa, reformar la cocina o el baño. Así como para revisar la instalación de calefacción, aire acondicionado o electricidad. Incluso, si estás pensando en reformar el jardín o instalar una piscina, puede ser la época perfecta para emprender la tarea y tener tu proyecto listo de cara al verano (temporada alta de encuentros al aire libre).
Verano
Es la época más popular para reformar la casa pero, en la práctica, no siempre resulta la más acertada. La principal ventaja frente a otras estaciones es que, si te decantas por hacer una reforma en verano tendrás más días libres. Y podrás seguir más de cerca el desarrollo de la misma. Sin embargo, ese descanso vacacional también afecta a instituciones, almacenes y proveedores. Por lo que, reformar tu casa en verano puede convertirse en una prueba a tu paciencia.
Además hay ciertos materiales que pueden verse afectados por las altas temperaturas. Por ejemplo: a la hora de reformar la casa piensas incluir la pintura de las paredes, rehabilitación de elementos de cemento o yeso, su secado será peor durante la época estival.
