El principal problema cuando nos encontramos con los vecinos morosos es que el resto de los propietarios asumen proporcionalmente los gastos impagados. Lo que hace que las cuotas de los caseros suban de nivel y se resientan los servicios inmobiliarios. Desde Fincas Juan Royo, hoy te hablamos de como gestionar una comunidad de vecinos morosos.
Un vecino moroso es un propietario que no está al corriente de los pagos de su comunidad. Ya sean ordinarios o extraordinarios. Estos pagos son aprobados por la Junta de Propietarios y son obligatorios para todos los vecinos propietarios de una vivienda o inmueble.
Así se gestiona una comunidad de vecinos morosos
Una de las ventajas de contar con un administrador de fincas es que este tipo de gestión, que puede generar tensiones, la realiza un tercero y no perjudica la convivencia. Existen diferentes pasos a seguir para tratar este tipo de inconvenientes. Siempre recomendamos que el administrador de fincas se ponga en contacto con el vecino. Si es posible para ver el motivo del impago. Y asegurarse de que es algo que puede resolverse o si es el inicio de una tendencia que podría conducir a un problema futuro.
Es esencial que las deudas de cada propietario queden reflejadas en el orden del día y en las actas de las juntas de propietarios. Recuerde que una deuda de este tipo significa que el propietario moroso no tiene derecho a voto. En la misma reunión, se puede ordenar al administrador que tome todas las medidas necesarias para proceder al cobro. Autorizándole a incurrir en gastos tales como abogados o procuradores si fuera necesario.
Para que la solicitud de los pagos de los gastos comunitarios impagados sea válida, es esencial poder probar que se ha notificado al vecino deudor. Desde una carta certificada hasta un correo electrónico certificado. Cualquiera es posible siempre que sea un documento oficial. Emprender acciones legales para reclamar el importe siempre será el último recurso. Incluso si el deudor no se opone, el procedimiento de embargo y recuperación no suele ser rápido.
La documentación requerida para una demanda con el fin de reclamar una deuda de un vecino es:
- Certificación de la resolución de la Asamblea en la que se comprueba la liquidación de la deuda.
- Notificación incuestionable al deudor.
- Si existen pruebas de los gastos incurridos en las gestiones previas para obtener el pago.
Este proceso puede durar más o menos tiempo. En función de la carga de trabajo del sistema judicial, que normalmente se encuentra sobrecargado. Y, una vez que se dicte sentencia a favor de la comunidad, lo más sencillo sería ejecutar el embargo del inmueble.