En la última década, el sector del alquiler ha experimentado en España un incremento verdaderamente importante. Cada vez son más las familias o jóvenes que se independizan y optan por alquilar una vivienda en lugar de adquirirla en propiedad. De ahí la importancia que tiene el conocer los derechos que asisten a los inquilinos ante la comunidad de propietarios. De ello vamos a hablar en este artículo.
El uso de las zonas y elementos comunes
Entre algunas comunidades de vecinos existe la falsa creencia de que los inquilinos que viven en régimen de alquiler no tienen los mismos derechos de acceso a las zonas comunes que los propietarios de las viviendas. Pues bien, conviene aclarar que una persona que viva de alquiler puede y debe acceder sin ningún problema a zonas comunes. Estas pueden ser la piscina comunitaria, el jardín, el garaje (si la vivienda alquilada lo tuviera) o las zonas deportivas.
La relación de los inquilinos con la comunidad de vecinos
Por otra parte, también hay que especificar que los arrendatarios de una vivienda no tienen derecho ni a participar en las juntas de propietarios de la comunidad. Tampoco pueden solicitar al presidente o administrador la convocatoria de una asamblea. Existe una excepción, y es que el propietario de la vivienda delegue por escrito en favor de su inquilino el derecho de asistir a las asambleas de la comunidad. En este caso, el inquilino sí tendría derecho a participar en las asambleas de la comunidad de vecinos, pero nunca a solicitar una asamblea porque ese derecho es exclusivo de los propietarios.
Por otra parte, el inquilino también tiene derecho a reclamar a la comunidad de propietarios por los posibles daños ocasionados a sus bienes y provocados por responsabilidad de dicha comunidad tras una rotura, avería o una obra comunitaria.
