En el momento de comprar una vivienda, existe una gran cantidad de documentación. En torno a la misma que conviene tener en cuenta. Entre ella, es lo relacionado con los estatutos de las comunidades de propietarios. Uno de los productos que cobran una mayor relevancia.
No obstante, y conscientes del desconocimiento que existe en torno a los mismos, a continuación hemos llevado a cabo un pequeño análisis para entender cuál es el origen de los mismos. Así como su naturaleza.
Los estatutos de las comunidades de propietarios, su definición
Los estatutos de las comunidades de propietarios son los encargados de regular toda la normativa relacionada con el régimen jurídico de la comunidad. Además, sirven para establecer cuáles son las acciones que están permitidas de aquellas que no lo están dentro de unas instalaciones en concreto.
Uno de los usos más importantes a los que se destinan estos estatutos hace referencia a las limitaciones que se deben realizar en los pisos y en los locales. Así como todo lo que hace referencia a la modificación de los elementos arquitectónicos presentes.
Obligatorio en el Registro de la Propiedad
Es importante que conozcas que no existe un modelo único para los estatutos de una comunidad de propietarios. Éstos deben ser redactados de acuerdo a las características de cada comunidad. La Ley de Propiedad Horizontal es la encargada de dictar que se debe llegar a un acuerdo tanto para su redacción como para su aprobación.
Una vez se lleve a cabo su aprobación, los estatutos se deben inscribir en el Registro de la Propiedad. Únicamente de este modo se podrá exigir que éstos sean cumplidos por parte del conjunto de los propietarios. En el caso de que no se registren, únicamente se verán obligados a llevar a cabo su cumplimiento los propietarios que los aprobaron. No los que se incorporen a posteriori.
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